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El cielo donde yo vivo se ha mantenido nublado desde que tuve resfriado, si vieras sus pequitas por las noches te gustaría quedarte más tiempo para imaginarnos paseando en un carrito oxidado del mercado. Sabes, hace mucho que no me como a la galaxia de un solo bocado mientras miro el camino de noche y ruego que no venga un ser con diez ojos a bajarme del colchón que hay bajo el naranjo. Dormir afuera es tranquilizante, sobre todo cuando hay alguien que sabe de luciérnagas y hoyos de gusano; es extraño como puedes sentir alguien tan parecido a ti tan dentro, y extrañarle, aunque sea nada mas para quejarnos de lo vivo, de lo no vivo y de eso que siempre vuelve a mermar la esperanza, el spleen es alguien cuando estoy contigo.

ti extraño, siempre seràs mi mejor amigo.