...
Si buscase un pretexto en las esquinas para sonreír, seguramente me verían solitaria murmurando entre dientes la alegría de verle cerca de mis brazos otra vez. Y aunque dicen que las historias de locos no se entretejen cuando has mordido tanta realidad, no creo tener que escuchar la amargura del razonable miedo, pues un poco de calor humano me ha bastado. no imagino como este encuentro me lleva rápido y gratis. Vuelvo a temblar, como cuando tenía una caja de betún de chocolate entre las manos, y esto no es una caja, es un él, su vida entera, un hombre dando lo más precioso para que yo lo coma, y por qué no habría de ser? Las estrellas dicen que nunca más me faltará alimento si lo mastico con cuidado.
1 comentario:
:3 sos tan linda, cuando siento complicidad conmigo entre tus lineas,joojo
Publicar un comentario