martes, agosto 26, 2014

Cigarros


 
Tengo once años y voy a encender mi primer cigarro. Marlboro rojo. Lo tomé de la cajetilla de mi Papá. Mi amiga T. también trajo uno de su Mamá. Mentolado. Nuestras familias se reúnen cada fin de semana. Tocan la guitarra, cantan. Toman y fuman. Cuando oscurece decimos a los Bohemios que vamos a la tienda. Cogemos las bicis,  pedaleamos hasta llegar a una barda que da al bulevar. Nos trepamos. Tiemblo. Siento un nervio que curiosamente me provoca satisfacción. Mis pies y los de T. cuelgan lejos del suelo. Reímos. Me pongo el cigarro en la boca y acerco la llama del encendedor.
 
 
Tengo once años y doce años y trece y catorce... No fumo.
 
 
 
 

lunes, agosto 25, 2014



 
La personalidad es un mito, una absurda reducción de la pluralidad de fuerzas que conviven en el interior de un individuo. “El hombre es una cebolla de cien telas, un tejido compuesto por muchos hilos”. El “lobo estepario” también es “zorro, dragón, tigre, mono y ave del paraíso”. Harry presume que la verdadera sabiduría no consiste en volver a ser niño (la alusión a Nietzsche es evidente), sino en “acoger al mundo entero en un alma dolorosamente ensanchada”.
 
Rafael Narbona

miércoles, agosto 20, 2014

 
 
 



todavía confío
en los "hasta luego"
 
 
 

lunes, agosto 18, 2014

 
 
 
 

Hay cosas extraordinarias de las que hablamos poco,
 dijo Miss Dadaway
 
 
Washington D.C.

miércoles, agosto 13, 2014

 
 
 
 


 
Las mujeres no tenemos Manzana de adán sino 
Rosa de los vientos
 
 
 
 

lunes, agosto 11, 2014

Colores

 
 
 
 
 
 
 



 
De Costa a Costa. Ca.-Va.
 

sábado, agosto 09, 2014

 
 
 

La (adjetivo) complicidad
nacida del sexo


cómplice.
(Del lat. complex, -ĭcis).

1. adj. Que manifiesta o siente solidaridad o camaradería. Un gesto cómplice.
2. com. Der. Participante o asociado en crimen o culpa imputable a dos o más personas.
3. com. Der. Persona que, sin ser autora de un delito o una falta, coopera a su ejecución con actos anteriores o simultáneos.
 
sexo.
(Del lat. sexus).
1. m. Condición orgánica, masculina o femenina, de los animales y las plantas.
2. m. Conjunto de seres pertenecientes a un mismo sexo. Sexo masculino, femenino.
3. m. Órganos sexuales.
4. m. Placer venéreo. Está obsesionado con el sexo.
bello ~.
~ débil.
1. m. Conjunto de las mujeres.
~ feo, o ~ fuerte.
1. m. Conjunto de los hombres.
 
 

Piyamada



Cuando tenía nueve, diez años, invitaba a mis amigas a dormir.  Éramos cuatro: Fabiola, Cristina, Liliana y Janeth. Sacábamos un altero de sarapes del clóset y los extendíamos en la estancia con muchos cojines y almohadas. Cada una se encargaba de llevar juegos de mesa y rentábamos  películas de terror en el Video Centro que estaba a cuatro casas de la mía. En la tiendita de enseguida (del Video Centro) le comprábamos chucherías a Doña Carmelita. Yo escogía Tin larín con nueces o almendras, y cooperábamos para comprar chamoys, palomitas, gomitas y unos jugos triangulares que podías llenar de aire después de terminarlo y ¡paf! reventarlo con un pisotón.  Fabiola era mi mejor amiga pero nunca se lo dije ni a ella ni a Cristina porque temía alejarla. Las cuatro éramos muy unidas.


Caminatas

 
 
 

 
Cambio de planes, re-invención de itinerario.
 
 

jueves, agosto 07, 2014



AMARILLO

 
A las Palabras les gusta estar acompañadas. Es raro conocer alguna que solitaria, sale de nuestra boca o aparece por sí misma en la página de libros y revistas. A excepción de los saludos, escoltados siempre por  Signos de puntuación, o los repentinos ¡Cuidado! ¡Carajo! a las palabras se les ve juntas. Según la ocasión optan por un significado. Son suaves, agresivas. Están contentas o afligidas. CRECIDAS en mayúsculas. “Meticulosas” cuando andan entrecomilladas. Los Artículos, los Sustantivos y los Adjetivos, forman grupitos y entonces dicen: la puerta roja, el paraguas desvencijado. A sus reuniones también suelen acudir los Verbos que siendo reaccionarios por naturaleza, andan todo el tiempo proponiendo si será posible, abrir o cerrar la puerta roja, arreglar el paraguas desvencijado. Las Palabras son unas loquillas ¡inventivas! dice el Sujeto que es el mejor amigo del Verbo y de quien por cuestiones de tiempo, hablaremos luego.